¿Es la dieta el 70% y el entrenamiento el 30%?
Analizamos el mito que establece porcentajes a la dieta y el entrenamiento
Seguro que has oído a alguien, o incluso tú, has pensado que la dieta cuenta más que el entrenamiento o viceversa cuando se trata conseguir un objetivo físico o deportivo.
¿Es esto realmente así? ¿Existen porcentajes para estas variables?
Hoy desde Arias Abellán Nutrición vamos a arrojar algo de información sobre este tema.
En primer lugar, debemos entender, que cuando hablamos de alcanzar un mejor físico o un objetivo deportivo, no solo tenemos las variables Alimentación y Entrenamiento. En realidad podríamos decir que estos pilares son 4 fundamentalmente.
- Entrenamiento
- Alimentación
- Descanso/ Sueño
- Factores psicológicos
Entrenamiento:
El entrenamiento es lo que podríamos tomar como variable de “activación”. En él vamos a ejercer el esfuerzo físico, orientado a alcanzar nuestro objetivo.
Si no cumplimos con esta variable, no daremos a nuestro cuerpo el estímulo necesario para evolucionar físicamente y por tanto… No habrá forma de mejorar.
Alimentación:
La alimentación la podemos englobar en el grupo de variables de “recuperación”.
Como tal, la alimentación nos permite recuperar y “sanar” los daños que hemos producido en el cuerpo con el entrenamiento, consiguiendo así la evolución física.
Es imprescindible aportar a nuestro organismo todos los nutrientes que necesita para recuperarse del esfuerzo físico.
Si no cumplimos con esta variable, no daremos a nuestro cuerpo la capacidad de recuperación necesaria para evolucionar físicamente y por tanto… No habrá forma de mejorar.
Descanso/ Sueño:
El descanso es otra variable de “recuperación”.
Su función es dar a nuestro cuerpo una recuperación mucho más intensa y efectiva, dándonos la capacidad de al día siguiente poder continuar con el ciclo.
Si nuestra cantidad y calidad del sueño no es suficiente, nuestro organismo no tendré la posibilidad de recuperarse óptimamente.
Si no cumplimos con esta variable, no daremos a nuestro cuerpo la capacidad de recuperación necesaria para evolucionar físicamente y por tanto… No habrá forma de mejorar.
Factores psicológicos:
Esta variable la podríamos considerar como variable “motivadora” del resto.
Mantener una mentalidad positiva, evitar el estrés, ser disciplinado y confiar en el proceso y en los profesionales que te estén ayudando, nos mantendrá motivados a cumplir con el resto de variables.
No cuidar de tu salud mental, nos llevará inevitablemente a no cumplir con cualquiera del resto de variables, lo que nos alejará del progreso físico y por tanto… No habrá forma de mejorar.
Bien pues como ves, las variables que están detrás de nuestra mejora física son independientes y a la vez inseparables.
Debemos entender que adjudicarle un % a estas variables nos va a hacer darle más importancia a unas que a otras, por lo que nos vamos a olvidar de las menos importantes y eso es un gravísimo error.
Veamos unos ejemplos:
1. Supongamos que tenemos muy bien controladas los variables entrenamiento, alimentación y psicología, pero no le damos importancia a nuestro descanso y nos acostamos todos los días a las 3 de la madrugada y con una calidad del sueño baja.
* Ejemplo 1
Esa condición nos va a provocar que al día siguiente estemos más cansados y fatigados, necesitaremos más horas de sueño que nos desplazarán la alimentación y el entrenamiento que a su vez también está afectado por esa fatiga.
Como ves, fallar en el descanso nos afecta directamente en las otras variables, por tanto esta debería tener un 100% de importancia y nosotros somos los encargados de hacerlo lo mejor posible, cuando más cerco del 100% estemos, más mejoraremos.
2. Supongamos que nuestro control sobre las variables entrenamiento y descanso es máximo, pero sin embargo la alimentación se nos resiente.
*Ejemplo 2
En estas condiciones nuestro cuerpo va a tener dificultades para recuperar el daño físico que ha supuesto el entrenamiento, estaremos agotados, fatigados, necesitaremos ampliar el descanso y nos estaremos alejando del objetivo.
3. Supongamos ahora que tenemos todas las variables controladas en un buen grado, por ejemplo al 90%, a excepción de la psicología.
*Ejemplo 3
Esto nos hace dudar del proceso, del plan establecido, consecuentemente nos baja la motivación, el entrenamiento ya no sale igual de bien y eso nos lleva a una ansiedad que nos lleva también a desplazar la alimentación, y entramos en un bucle de los más común, que nos aleja del objetivo y todo desencadenada por no tener una mentalidad positiva y confiada.
CONCLUSIÓN:
Como hemos podido observar la mejora física se fundamenta en 4 grandes pilares, los cuales tienen 2 características principales, son individuales y a la vez indivisibles. Esto quiere decir, que todos tienen importancia máxima, del 100%, pero que a su vez todos dependen de los demás y fallar en uno, casi siempre supone fallar o modificar otros.
Es por ello que debemos dar lo mejor de nosotros mismos en cada faceta, y cuanto mejor lo hagamos, más cerca estaremos de alcanzar nuestro objetivo,
Espero que os haya gustado y servido esta información.
Un saludo y hasta la próxima!
Autor: Víctor Sánchez ( Alumno en prácticas en Arias Abellán Nutrición).



